Cuando el famoso
explorador Alexander Von Humboldt visitó las mesetas centrales de México en el
siglo XlX, quedó impresionado con una criatura misteriosa que habitaba en los
alrededores de los lagos de Chalco, Texcoco y Xochimilco, tanto que llevó
consigo dos de estos ejemplares a París.
Así, el ajolote o
axolotl llegó a Europa, en donde después de mucha confusión, se llego a la
conclusión de que no era más que una gran larva de salamandra.
Años más tarde se
descubrió que bajo condiciones que rara vez ocurren en la naturaleza, el
ajolote podría sufrir una metamorfosis que lo transformaría a su forma adulta.
El ajolote mexicano
fue un habitante común de los lagos centrales del Valle de México por miles de
años y jugó un papel importante dentro de la cosmología de la cultura Azteca,
pero durante los últimos 300 años, en especial la última mitad del siglo XX, su
hábitat se ha reducido a prácticamente nada, y el poco que queda disponible
enfrenta serios problemas como la contaminación.
Los últimos censos
realizados indican que esta especie se encuentra ene estado crítico de
desaparición y se necesita de un gran esfuerzo para salvarlo, no sólo a él,
sino a todo una serie de ecosistemas: El sistema lacustre del Valle de México,
del cual forma parte el Área Natural Protegida Ejidos de Xochimilco y San
Gregorio Atlapulco.
El ajolote es una
de tantas especes que habitan en esta área protegida, la riqueza que
encontramos en el lago y canales de Xochimico es inimaginable, te invitamos a
visitarlo y a cuidar, conoce su lado ecológico y enamórate de sus maravillas.